Landa Vaz, Rubén

LANDA VAZ, RUBÉN. Badajoz, 1890-México, 1978.

Hijo de un abogado y periodista, masón, librepensador y destacado dirigente republicano, Rubén Landa Coronado (1849-1923), y de la portuguesa Maria Jacinta Vaz Toscano. Tuvo tres hermanas: Aida, Jacinta –fundadora en 1933 en Madrid de la Escuela Plurilingüe-, y Matilde, que ocupó cargos de responsabilidad en el Partido Comunista de España durante la guerra civil, falleciendo en la cárcel de Mallorca en 1942.  

Su padre, amigo personal de Nicolás Salmerón, uno de los presidentes de la Primera República española, y de Francisco Giner de los Ríos, le introdujo en los ideales de la Institución Libre de Enseñanza (ILE).

En 1906 Rubén Landa comenzó en Madrid sus estudios pedagógicos, llegando a obtener el título de maestro superior, y universitarios. Obtuvo la licenciatura de Filosofía y Letras y se doctoró en Derecho en 1912.

Se vinculó estrechamente a partir de ese año a diversas actividades e iniciativas, promovidas por la Institución Libre de Enseñanza.

En 1912 fue nombrado auxiliar de la Secretaría de la Junta para Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas para ayudar en la gestión de organismo que coordinaba la política científica y educativa a su secretario, el catedrático de Derecho Romano José Castillejo. También trabajó en la secretaría de la Residencia de Estudiantes.  Efectuó prácticas de enseñanza, entre 1914 y 1919, de su Grupo de Niños, formado por alumnos de segunda enseñanza.

Viajó a Portugal, el país natal de su madre, entre el 10 de mayo y el 29 de julio de 1918, para estudiar su sistema de segunda enseñanza, obteniendo la condición de pensionado de la JAE. Visitó en esas semanas numerosos establecimientos educativos, particularmente liceos, en Lisboa, -como el de Pedro Nunes-, Coimbra, Evora, Santarem y Leiria. Se entrevistó con numerosas personalidades que le informaron sobre las características de la enseñanza secundaria portuguesas, como el director de la Biblioteca Nacional Fidelino de Figueiredo y el profesor del liceo de Oporto Sousa Vasconcelos. Con la amplia información recogida presentó una amplia memoria a la JAE, evaluada favorablemente. Obtuvo entonces un certificado de suficiencia como pensionado de la JAE. Editaría esa memoria en diversas publicaciones como el Boletín de la Institución Libre de Enseñanza (1922) y la revista portuguesa O Instituto (1927).

En ese mismo año de 1918, al crearse el Instituto-Escuela por iniciativa de la JAE para ensayar métodos pedagógicos y formar al profesorado secundario, fue nombrado  aspirante al Magisterio secundario en la sección preparatoria de esa institución educativa. Poco después obtuvo una cátedra de instituto de Psicología y Lógica, asignatura que impartiría en Salamanca, en Segovia –entre 1927 y 1931-, y en El Escorial, de cuyo instituto fue director durante la Segunda República.

Estando en Salamanca, y tras presentar diversos trabajos como un ensayo sobre “El problema de la libertad de la voluntad en la filosofía de Bergson y en el pragmatismo”,  la JAE le concedió una pensión de 20 meses para estudiar en Francia e Inglaterra la organización de la Segunda Enseñanza.  

Inició su viaje el 2 de noviembre de 1921. Visitó en ambos países numerosos establecimientos educativos, presenció clases, y estudió diversos aspectos de la vida escolar como las cuestiones disciplinarias  y la organización de los internados.

En Francia además de estudiar la reforma de la segunda enseñanza francesa, que estaba entonces en preparación, visitó, por ejemplo, en Paris los liceos  Enrique IV, Luis el Grande, Sanson de Sailly, Montaigne, Carlomagno, Michelet y Fenelon.  En Inglaterra visitó escuelas secundarias de distintos tipos. De las “Public schools” conoció las  de Eton, Harrow, Rugby, Winchester, Westminster, Highgate, Saint Paul, Stonyhurst,  y Dulwich.  Entre las modernas estudió el funcionamiento de la de Bedales, donde residió una semana, en la que había coeducación. Asistió asimismo a clases para profesores de segunda enseñanza en el  “London  Day Training College”,  a cursos de Pedagogía en el “College of Preceptors”, y en el “University College” de Londres, a la “Conference of Educational Associations”. Y en julio de 1923 estudió las dos Exposiciones que se celebraron en Londres con motivo de la Conferencia Imperial de Educación.

Se entrevistó asimismo con políticos, pedagogos y funcionarios como inspectores de segunda enseñanzas. En Francia con los directores de la Escuela Normal Superior y el Museo Pedagógico de París y el decano de la Facultad de Letras de la Sorbona. En Inglaterra, entre otros, con Michael Sadler y el profesor de Pedagogía en la Universidad de Londres y director del “London Day Training College” míster Nunn; y con varios funcionarios del “Board of Education”. Y oyó diversas conferencias sobre educación impartidas por pedagogos como lord Haldane, M. Sadler y la doctora Montessori.

Al regresar a Salamanca intentó impulsar en su Instituto la enseñanza del francés e inglés, organizando clases gratuitas de esta lengua, e hizo gestiones para estimular el asociacionismo escolar, según expuso a José Castillejo en carta fechada el 24 de septiembre de 1924.  

Entre 1926 y 1928 a caballo de Salamanca y Segovia tradujo cinco obras del alemán e inglés, relacionadas con la Sicología y la Pedagogía para la prestigiosa Biblioteca de Iniciación Cultural de la editorial Labor, en la que tenía importantes responsabilidades su compañero del claustro del instituto segoviano Leonardo Martín Echeverría. También tradujo un folleto del arqueólogo alemán Adolf Schulten sobre el emplazamiento celtíbero de Cauca, en la actual Coca segoviana.

En Segovia coincidió también con el catedrático Antonio Machado. Estos tres profesores –Landa, Martín Echeverría y Machado- abrazaron la causa republicana, militando en Acción Republicana, la fuerza política dirigida desde 1930 por Manuel Azaña y José Giral.

Iniciada la Segunda República Rubén Landa desempeñó diversas funciones políticas. Por  decreto de 4 de mayo de 1931 fue nombrado consejero de Segunda Enseñanza, Escuelas de Comercio y otras especiales en el Consejo de Instrucción Pública. Al transformarse en 1932 esa institución en Consejo Nacional de Cultura Rubén Landa permaneció como consejero hasta 1934. Volvería a asumir esa responsabilidad por orden de 13 de junio de 1936 tras la victoria electoral del Frente Popular en febrero de ese año. En 1933 fue elegido integrante de la Junta Técnica de la Inspección General de Segunda Enseñanza dependiente del Ministerio de Instrucción Pública.

Asimismo formó parte de la Federación Española de Trabajadores de la Enseñanza de la UGT, sindicato en el que desempeñó cargos de relevancia.

Durante la Guerra Civil realizó múltiples actividades. Cooperó en campañas de alfabetización con las Milicias de la Cultura, creadas en 1937, y con la elaboración de la Cartilla Militar Antifascista. Dirigió durante unos meses la colonia escolar de Villalgordo del Júcar (Albacete). Organizada por su cuñado el ingeniero Casimiro Mahou y su mujer Jacinta Landa para los hijos de los trabajadores de la fábrica de cervezas Mahou otros miembros de su familia se implicaron en su gestión. Trabajaron en ella su mujer María Luisa Viqueira  y su hermana mayor Aida fue su directora administrativa.  En 1938 asumió la secretaría de la Comisión delegada de la Junta para Ampliación de Estudios cuando tenía su sede en Valencia, y a fines de ese año viajó a la Unión Soviética acompañando a los llamados niños de la Guerra.  

Exiliado en México, Landa comenzó a trabajar en la Academia Hispano Mexicana, una de las primeras instituciones educativas creadas por los refugiados españoles en  ese país. Entre 1942 y 1947 dirigió el Instituto Luis Vives, centro educativo creado por el Comité Técnico de Ayuda a los Republicanos Españoles (CTARE), auspiciado por Juan Negrín e impulsado por su presidente José Puche, antiguo rector de la Universidad de Valencia.  Esta institución trasladó a México el ideario educativo institucionista, y las prácticas pedagógicas de los Instituto-Escuela impulsados por la JAE, consiguiendo un notable prestigio en el seno de la sociedad mexicana. Sigue funcionando en la actualidad.

Nombrado en 1942 presidente del Patronato de los Niños de Morelia impulsó diversas iniciativas para cuidar de los niños españoles llegados a México en 1937 e instalados en la capital del Estado de Michoacán.

Entre 1948 y 1955 Rubén Landa fue profesor del departamento de Lenguas Modernas de la Universidad de Oklahoma en Norman. En esos años publicó numerosos artículos y reseñas de historia de la cultura española e hispanoamericana en la revista Books Abroad, fundada en 1927 por Roy Temple House, y antecedente de la actual revista World Literature Today.

 Tras regresar a México se instaló a partir de 1956 en la ciudad de Guanajuato enseñando en la Facultad de Filosofía y Letras de su Universidad y participando en campañas de educación de adultos. En los años finales de su vida se incorporó, a partir de 1972, a la plantilla docente del Colegio Madrid en la capital de la república mexicana. Allí impartiría clases de filosofía e inglés.

Durante su largo exilio continuó su labor traductora. El Fondo de Cultura Económica publicó en 1946 sus traducciones de Libertad y planificación social de Karl Manheim y Psicología social de L.L. Bernard. Años después colaboró en el equipo que tradujo para esa editorial mexicana la monumental  Historia del pensamiento socialista de Geoge Douglas Howard Cole. También tradujo en 1952 para la editorial Atlante, creada por exiliados republicanos españoles en Paris y en México en 1939 El mar que nos rodea, de Rachel Carson, en cooperación con Enrique Rioja.

También publicó cinco importantes libros entre 1965 y 1973. Dos de ellos dedicados a figuras relevantes del humanismo español como Luis Vives, y Vasco de Quiroga, jurista y primer obispo de la diócesis mexicana de Michoacán donde fundó los famosos hospitales-pueblo. Y otros dos en los que presentó, con el apoyo de numerosos testimonios, las aportaciones pedagógicas de sus maestros españoles: Francisco Giner de los Ríos y Manuel Bartolomé Cossío.

PRINCIPALES OBRAS: “Estado actual de la segunda enseñanza en Portugal”, Boletín de la Institución Libre de Enseñanza, XLVI, (1922): págs. 237-246; “La enseñanza secundaria en Portugal”, O Instituto (1927), vol. 74, págs. 44-85, 204-225; vol. 75, págs.. 202-217, 437-454; vol. 76, págs. 63-75; Guía para enseñar a escribir y leer a los adultos, México, 1944; “Martí como maestro”, Cuadernos Americanos, año XII, vol. LXXI, (1953),  Don Vasco de Quiroga, Barcelona, 1965; Sobre don Francisco Giner, con una carta inédita, México, 1966; Luis Vives y nuestro tiempo, México, 1969;  Giner visto por Galdós, Unamuno, Antonio Machado, Juan Ramón Jiménez, Alfonso Reyes, etc., Selección y notas de Rubén Landa, México,1969; “Reflexiones sobre la enseñanza en México”, Cuadernos Americanos, (julio-agosto 1971), págs. 60-78; Manuel Bartolomé Cossío: cartas inéditas, necrologías y otros escritos. Selección y notas de Rubén Landa, México, 1973; “Mis recuerdos de Antonio Machado”, Añil, Cuadernos de Castilla-La Mancha, (2000), págs. 68-71

FUENTES: Archivo de la JAE en la Residencia de Estudiantes. Expediente JAE/83-51, 73 pp

RANGEL MAYORAL, Modesto Miguel: Rubén Landa Vaz. Un pedagogo extremeño de la Institución Libre de Enseñanza en México. Mérida: Editora Regional de Extremadura, 2006; GRANILLO VÁZQUEZ, L., “Pedagogía extremeña para Guanajuato: Rubén Landa en México”, Revista de Estudios Extremeños, tomo LVII, nº 2, (2001), págs.. 459-463 en http://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/pedagoga-extremea-para-guanajuato---rubn-landa-en-mxico-0/html/ffa69cd4-82b1-11df-acc7-002185ce6064_2.html#I_1_; “O Instituto de Coimbra e o Ensino Secundário em Portugal na Primeira República. O caso particular das Ciencias Físico-Químicas, Revista Portuguesa de Educaçao, vol. 25, nº 1 (2012), págs. 165-191 en http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=37425191008

 

 

Leoncio López-Ocón Cabrera